Ni devoción ni fanatismo tengo por los libros, mucho menos los PDF. Si algún «gran» gozo aportan los libros al leerlos es cuando lo haces bajo alguna sombra de algún fresno o paraíso, lejos de las ciudades, tranquilo en soledad. Lo que sea menos a través de una pantalla. Pero, mi querido perro, somos pobres.
Algunos me cautivan más que otros pero todos erran en Mí como vientos arremolinados que poco a poco erosionan los mapas rocosos de las Ideologías. Ensayos, crónicas, análisis, investigaciones, novelas, poesía, teatro, tragedias formarán esta biblioteca virtual nómada, individual y apolítica.
Y, me gustaría en algún momento escribir mis percepciones y sensaciones de estos libros llameantes a modo de exordio… pero en algún momento, sin prisas que todo lo que se crear se puede destruir. Mientras, aprovecho este espacio para dejar algunos enlaces de algunos libros que no recomiendo, sino que, simplemente, me satisfacen anárquicamente.